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En el nuevo National Institute of Information and Communications Technology (NICT) de Tokio, los tejidos de acero inoxidable de GKD cumplen varias funciones a la vez, como protección solar, pantalla de privacidad y protección contra caídas. Además, también transmiten perfectamente el concepto arquitectónico.
Una de las consecuencias de la digitalización y el aumento de la interconexión es que está aumentando el riesgo de ciberataques. Por ello, cada vez son más importantes las estrategias para detectar los riesgos y las medidas para reforzar la seguridad de la información. En Japón, el National Institute of Information and Communications Technology (NICT) está asumiendo estas exigentes tareas. El NICT es la única agencia nacional de investigación y desarrollo del país especializada en el campo de las tecnologías de la información y la comunicación. Su objetivo es sentar las bases del crecimiento económico y la seguridad social en la era digital.
La arquitectura del edificio del NICT de Koganei, en la prefectura de Tokio, encarna específicamente esta combinación de seguridad y protección, por un lado, e intercambio y transparencia, por otro.El nuevo edificio, diseñado por el renombrado estudio de arquitectura japonés Nihon Sekkei ha sido concebido de tal manera que permite zonas para el intercambio abierto y zonas protegidas, como las destinadas al Cybersecurity Research Institute, que también tiene aquí su sede.
El carácter abierto sigue estando presente
Los tejidos arquitectónicos de GKD también desempeñan un papel decisivo en el carácter general y la funcionalidad del edificio.«Como fachada, los tejidos de acero inoxidable cumplen tres funciones distintas», explica Thomas Holtkötter, Business Development Manager de GKD responsable para Asia. «La fachada sirve de protección contra el sol y como pantalla de privacidad y está dispuesta delante de la fachada real como acabado de los balcones. Está montada en la construcción de la barandilla en la parte inferior y está fijada —y después tensada— en el tejado en voladizo en la parte superior. De este modo, también cumple la función de protección contra caídas sin alterar la impresión general de apertura y transparencia», afirma Holtkötter.
Un total de 23 paneles del tejido Omega 1520 forman una segunda piel transparente y parcial del edificio que cubre 567 metros cuadrados en el NICT.La estructura de tejido horizontal y los paneles, de hasta 9,5 metros de largo y cuatro de ancho, confieren a la fachada del edificio una sensación general de claridad y calma, pero sin envolverlo por completo.
Subestructura para el radio deseado
Para el NICT, GKD suministró tejido de acero inoxidable para el techo del vestíbulo, además de paneles para la fachada exterior. El reto a la hora montar el tejido de casi diez metros de largo y tres de ancho era que el total de 16 paneles Omega 1530 estaban fijados a diferentes alturas y a la vez debían curvarse todos en el mismo radio. «Y se consiguió», explica Holtkötter, «tirando y tensando del tejido sobre una subestructura modeladora. Esto permitió conseguir el radio deseado de los paneles del techo».
El cliente de GKD para el proyecto del NICT fue Asahi Building-Wall Co. (CGC). El GKD Group ya ha realizado varios proyectos con la empresa japonesa y especialista en fachadas de edificios, como la espectacular fachada LED de la tienda de Zara de Shinjuku (Tokio).
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