Tejido sinterizado

El tejido sinterizado se refiere a una malla de alambre que ha sido reforzada mediante sinterización (un proceso térmico de difusión). Durante la sinterización, las mallas de alambre de una o varias capas se calientan en un horno (bajo atmósfera protectora o vacío) hasta que los puntos de cruce de los alambres se fusionan entre sí, sin que el material se funda completamente. Esto crea una red metálica porosa rígida y estable en forma, en la que los alambres están firmemente unidos.

A menudo se combinan varias capas de diferentes tejidos para formar un laminado sinterizado: por ejemplo, una capa fina de filtración y una o más capas de soporte más gruesas, que se sinterizan juntas. El resultado es un medio filtrante con un tamaño de poro definido y al mismo tiempo alta resistencia mecánica. El tejido sinterizado no se deshilacha, soporta altas diferencias de presión y generalmente puede ser limpiado o retro-lavado, lo que permite su reutilización.

Las áreas de aplicación son filtraciones exigentes en la industria química, del petróleo y gas, hidráulica o procesamiento de alimentos — en todos los casos donde se requieren filtros metálicos con una precisión de filtrado y estabilidad exactas.

En aplicaciones arquitectónicas, el tejido sinterizado se usa rara vez, ya que visualmente parece más bien una placa mate y porosa, y cumple principalmente funciones técnicas. Sin embargo, en casos específicos, las placas sinterizadas podrían usarse como elementos decorativos, difusores de luz o absorbentes de sonido.